-Pinsapo de las Siete Vigas.
Simón de Rojas Clemente y Rubio colabora con unas “Adiciones”
en el libro “Agricultura General” de Alonso de Herrera en Madrid,
año 1.818. Cuando estudia los abetos hace una somera descripción
de los pinsapos (o pinabetes); comenta textualmente : “Es muy célebre
y hermoso el pinsapo que se encuentra en el camino de Ronda a Tolox cerca
del Puerto de Las Animas, llamado de Las Siete Vigas por sus siete larguísimas
ramas o brazos principales, casi iguales, y distribuidos en derredor del
tronco con maravillosa simetría.” (Información cedida por
J. Albertos).
Desgraciadamente de este magnífico árbol solo queda el
recuerdo.
-Pinsapo de los Cazadores.
Este ejemplar de la especie pinsapo, se hallaba en las cercanías
de la Cueva del Pinar. Según nos cuentan tenía una altura
superior a los treinta metros, no tenemos datos del perímetro del
tronco pero es de suponer que era de considerables dimensiones.
Era muy conocido por los cazadores del lugar por que en sus ramas superiores
solían posarse las palomas torcaces que habitaban en gran número
en el pinsapar y alrededores. Se comentaba, de forma jocosa, que tal era
la altura del pinsapo que ni siquiera los perdigones de los cartuchos alcanzaban
a las palomas.
A mitad del tronco existía un rico panel de abejas, que fue
el motivo para que en el intento de prender la miel, colocaran dos barrenos
en el tronco del pinsapo, tras explosionarlos el pinsapo pasó a
mejor vida.
Otros pinsapos conocidos por sus dimensiones, son: el llamado Moreno,
situado en la cañada de Bellina; el pinsapo Azul, en la cañada
de la Violeta y el pinsapo Candelabro cerca del llano del Alcornicalejo.